El 90% de los casos de diabetes tipo 2 están vinculados a la acumulación de grasa corporal ectópica

La obesidad y la diabetes mellitus tipo 2 (DM2) han dejado de ser consideradas enfermedades aisladas. En la actualidad, se entienden como parte de un espectro más amplio de patologías metabólicas interconectadas, lo que ha llevado a un cambio conceptual en su diagnóstico, tratamiento y prevención. Así lo han manifestado los médicos internistas en la XIX Reunión del Grupo de Diabetes, Obesidad y Nutrición (DON) de la Sociedad Española de Medicina Interna (SEMI), celebrada en Zaragoza los días 30 y 31 de enero de 2025.

Revolución conceptual
Uno de los aspectos más relevantes discutidos en la reunión ha sido la necesidad de abandonar la visión reductora de la obesidad basada únicamente en el índice de masa corporal (IMC). Se ha destacado que no existe una única obesidad, sino múltiples formas de esta enfermedad, con manifestaciones clínicas y consecuencias distintas. En este sentido, la prestigiosa revista The Lancet ha propuesto recientemente una nueva definición de obesidad que enfatiza el impacto del exceso de grasa en la función de órganos y tejidos, más allá de una cifra de IMC.

No existe una única obesidad, sino múltiples formas de esta enfermedad, con manifestaciones clínicas y consecuencias distintas

La clínica de obesidad, como ahora se denomina, se diagnostica no solo con medidas antropométricas, sino también con la evaluación de la funcionalidad de los órganos afectados. La acumulación excesiva de grasa en el hígado, el páncreas o los músculos puede desencadenar patologías como insuficiencia cardíaca, enfermedad renal crónica y enfermedad metabólica hepática, entre otras.

Nuevos enfoques terapéuticos
En la reunión de la SEMI se ha puesto de manifiesto la importancia de los nuevos tratamientos farmacológicos para la obesidad y la diabetes. En 2024, la aprobación de fármacos como semaglutida y tirzepatida ha supuesto un avance significativo. Estos medicamentos no solo facilitan la pérdida de peso, sino que también han demostrado beneficios adicionales, como la reducción del riesgo de eventos cardiovasculares, la mejora en la insuficiencia cardíaca y la disminución del dolor articular en la artrosis.

Tirzepatida, por ejemplo, ha mostrado una reducción del 25% en los episodios de apnea obstructiva del sueño en pacientes con y sin tratamiento con CPAP

Tirzepatida, por ejemplo, ha mostrado una reducción del 25% en los episodios de apnea obstructiva del sueño en pacientes con y sin tratamiento con CPAP. Por su parte, la semaglutida ha demostrado disminuir en más del 20% el riesgo de recurrencia de eventos cardiovasculares y mejorar la calidad de vida de los pacientes con insuficiencia cardíaca con fracción de ojo preservada.

Estos avances han llevado a que países como Reino Unido y Estados Unidos comiencen a considerar la financiación de estos tratamientos en pacientes con obesidad grave y alta carga metabólica. En España, sin embargo, estos fármacos aún no están cubiertos por el Sistema Nacional de Salud (SNS), lo que ha generado un debate sobre su accesibilidad y la necesidad de replantear las políticas de salud pública.

Interconexión entre obesidad y diabetes tipo 2
Se estima que aproximadamente el 90% de los casos de diabetes mellitus tipo 2 están relacionados con la obesidad. Sin embargo, no todas las personas con obesidad desarrollan diabetes. En los últimos años, se ha abandonado el término “obeso metabólicamente sano” debido a la falta de precisión de este concepto. La acumulación de grasa ectópica en órganos clave, como el páncreas, puede comprometer la producción de insulina y desencadenar diabetes, independientemente del IMC.

La acumulación de grasa ectópica en órganos clave, como el páncreas, puede comprometer la producción de insulina y desencadenar diabetes, independientemente del IMC

Durante la reunión, se presentó la “Actualización 2025 para el tratamiento de la DM2”, donde se destacó la importancia de los fenotipos en diabetes. No todas las personas con esta enfermedad presentan el mismo perfil metabólico ni responden igual a los tratamientos. Algunos pacientes tienen un mayor riesgo de deterioro renal, mientras que otros son más propensos a eventos cardiovasculares. Identificar estos perfiles permite personalizar los tratamientos y mejorar los resultados a largo plazo.

Un hallazgo particularmente esperanzador es la posibilidad de regresión de la diabetes en algunos pacientes con obesidad tratados con los nuevos fármacos. La reducción significativa de peso puede mejorar la sensibilidad a la insulina y, en algunos casos, permitir la suspensión del tratamiento farmacológico. Esta estrategia supone un cambio de paradigma en el manejo de la diabetes, que deja de centrarse exclusivamente en el control de la glucosa y pone el foco en el tratamiento integral de la enfermedad metabólica subyacente.

Papel de la sarcopenia en el paciente metabólico
Otro de los temas abordados en la reunión ha sido la sarcopenia, una condición caracterizada por la pérdida progresiva de masa y función muscular, que afecta al 22% de los mayores de 60 años y más del 70% de los pacientes hospitalizados en medicina interna. Se ha subrayado la importancia de la detección temprana y del tratamiento multidisciplinario, que debe incluir ejercicio de fuerza y suplementación proteica. La sarcopenia comparte mecanismos fisiopatológicos con la obesidad y la diabetes, especialmente la inflamación de bajo grado crónica, lo que refuerza la necesidad de un abordaje integral en estos pacientes.

La identificación de diferentes fenotipos en diabetes, la redefinición del concepto de obesidad y el uso de nuevas herramientas terapéuticas están transformando el panorama clínico

La XIX Reunión del Grupo DON de la SEMI ha reafirmado la necesidad de un enfoque global en el manejo de la obesidad y la diabetes. La visión tradicional, que se refiere a estas enfermedades de forma aislada, está siendo reemplazada por un modelo basado en la personalización del tratamiento y el abordaje de las comorbilidades metabólicas asociadas. La identificación de diferentes fenotipos en diabetes, la redefinición del concepto de obesidad y el uso de nuevas herramientas terapéuticas están transformando el panorama clínico.

Los avances en farmacoterapia y la comprensión de la interrelación entre estas enfermedades abren la puerta a estrategias más efectivas, capaces de mejorar la calidad de vida de los pacientes y reducir el impacto de estas patologías en el sistema sanitario. Sin embargo, el reto sigue siendo garantizar el acceso equitativo a los tratamientos y promover políticas de salud pública que aborden la obesidad y la diabetes desde una perspectiva integral y basada en la evidencia científica

Con información del universal